Donde sólo el que siente me podría ver.
¿Hay alguna forma de explicarlo? ¿Hay alguna manera racional de entenderlo? No sé, yo no la encuentro. Apenas si puedo poner en palabras qué siento, cómo lo siento, como para pretender por qué. Sé que aparecieron en mi vida de pura casualidad, y yo me quedé con una frase en la cabeza durante días. Después, la busqué en Internet y descubrí su página. “En esa época” se podían escuchar fragmentos de las canciones, y yo antes de ir a jugar al básquet no me sacaba los auriculares y llegaba a entrenar con los minutos contados para cambiarme y correr. Sé que el día que suspendieron un recital (con entrada en mano) fue tristísimo. Por Dio’, que mal que me sentía ese día. Que pocas ganas de cualquier cosa. Que banda de mierda que me hacía sentir así. Pero no tiene nombre la felicidad, la incredulidad de mis amigos el día del primer recital. “¿A dónde vas?”, preguntaban. No entendían nada. Y siguen sin entenderlo, cosas de la vida. Que bien la pasé. Después de eso, un torrente de emociones no pa