NO SE PUEDE ESTAR SIEMPRE VIVIENDO Y MURIENDO

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Hay una angustia acá, un dolor punzante que dice que nada es para siempre que ni lo es el amor y tampoco lo será este dolor, pero cual termine primero determinará el destino del segundo. Hay una inseguridad acá, latente que golpea, entra y se queda, disfruta de lo poco que está sano y carcome de a pedazos las reservas de cordura que va dejando el tiempo y tu #ser. Tu #ser se va descomponiendo y luego renaciendo, NO SE PUEDE ESTAR SIEMPRE VIVIENDO Y MURIENDO! No se puede convivir con la violencia mental, con la violencia sentimental y la violencia corporal, no se puede estar entre la guerra y la paz solo y aprisionado en un mismo cuerpo que te exige a gritos que encuentres el tesoro, ese que todos llaman paz. Hay una lucha permanente, acá donde se siente, entre miedos y certezas, entre anhelos y decepciones, entre noches y soles que no van con el tiempo, momentos que de repente se tornan insoportables y momentos que de repente son mejores que el propio Edén. No se puede estar siempre en una dicotomía tensionante, que resquebraja todos los vínculos, yo sé que algún día quien más los aguante, no los querrá aguantar más. No se puede lidiar contra esta cabeza que no encuentra más opciones, que sólo comprende que quedará sola entre tantas preguntas, que nunca alcanzará la calma, que la tranquilidad no es compatible con su vida, que la vida misma sin tranquilidad no es vida, y la falta de tranquilidad genera pérdidas. ¿Para qué quiero vivir si se que al final voy a perder(te)?, ¿Para qué quiero seguir sintiendo, si esto también forma parte de sentir?


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