Bien.

(Ni revuelvo en las causas perdidas)

Podría acostumbrarme toda la vida a pasar por estos momentos. Vale la pena tanto pasado si después toca recibir esto otro. Me llena el alma saber que importa, que al final parecieran ir acomodándose ciertas cosas que van más allá de mi, que creo que podrían hacernos tan feliz. Me llena de alegría verla sonreír, disfrutar que la vida cobra y paga, que todo en definitiva está saliendo mejor y con ganas y esfuerzo se podrá también conseguir lo demás. Me hace muy feliz pensar en el 'proceso' de todo esto. Y hoy al final, volando en una nube tan alto, sin un sólo pie en la tierra, espero que dure la realidad. Y de mi, y de vos, y de ellos dos. Y del primer par, quiero creer, quiero soñar, pero algo me lleva a bajar. Y al margen de eso, vale la pena.

Comentarios

Entradas populares de este blog

.

Montaña y símbolo fálico.