Es tan perfecto que asusta.

Sí, bueno, tal cual. 
Si es cuestión de confesar (como dice Belu), esto me está carcomiendo.
Si es cuestión de cocinar, no me gusta la cebolla.
Si es cuestión de gritar, nunca tengo voz.
Si es cuestión de correr, nunca me dan los pulmones.
Si es cuestión de adicciones, creo que las perdí. 
Si es cuestión de dolor, se manifiesta como distante.
Si es cuestión de pelear, ya no quiero nada más.
Si es cuestión de soñar, quiero que sea compartido.
Si es cuestión de remar, a veces me canso, a veces no doy más.
Si es cuestión de llorar, me cuesta un poco más que ayer.
Si es cuestión de blanquear, nunca encuentro las palabras.
Si es cuestión de reclamar, me arrepiento después.
Si es cuestión de perdón, no me cuesta, no.
Si es cuestión de miedo, me sucede muy seguido.
Si es cuestión de miedo, tengo una inseguridad con tu nombre.
Si es cuestión de miedo, es angustiante.
Si es cuestión de inseguridad, sólo necesito de vos.

¿Y si de repente, deja de ser cuestión de mi, y pasa a ser cuestión de vos? ¿Y si de repente, mutas y cambias y enfocas para allá? Y.. si de repente.. potenciamos todo y se derrumba.

Quiero ver con tus ojos y volver a soñar.

Comentarios

  1. ¿ Y si es cuestión de amor? o simplemente no es cuestión, es amor :) :O xq tiene que ser cuestión!

    ResponderEliminar
  2. Ojalá...

    Miedo a ser parte del juego. Mucho. Pero ojalá.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

.

Montaña y símbolo fálico.